Todos tenemos la tendencia natural a organizar la información, así como a despertar gusto por la información organizada. Con las webs de empresas ocurre algo similar: al empresario le conviene dividir en secciones los servicios de la empresa y el usuario tendrá más clara esta división a la hora de acceder a alguna de ellas. Para ello sirven los subdominios en SEO pero, ¿qué son exactamente? ¿cómo afectan al SEO de tu web? Te lo respondemos en el siguiente post.
Se define como una extensión de un dominio principal que crea una sección independiente dentro de un sitio web. Por ejemplo, en la dirección “blog.mavance.es”, “blog” sería un subdominio del dominio “mavance.es”. Puedes utilizarlos para organizar contenido especializado o diferenciado, como tiendas en línea, secciones de soporte o blogs, manteniendo al mismo tiempo una conexión con el dominio principal. Al estar separados del dominio principal, te permiten estructurar grandes sitios sin perder claridad en la navegación.
Desde la perspectiva del usuario y de los motores de búsqueda, pueden considerarse como un sitio secundario vinculado al dominio principal. Sin embargo, su independencia permite configuraciones y optimizaciones que no afectarían al resto del sitio, como temas visuales distintos o estrategias SEO específicas.
Ambos se utilizan para organizar contenido del sitio o página web de una entidad, pero de formas distintas:
Para aclarar un poco los conceptos hasta ahora dejamos la siguiente imagen:
En cuanto al SEO, ambos se tratan de forma distinta. Mientras que los subdirectorios contribuyen directamente a la autoridad y relevancia del dominio principal, los subdominios pueden aparecer en los resultados de búsqueda como sitios independientes, lo que podría dispersar la autoridad y los enlaces del sitio principal.
Tienen un impacto directo en la estrategia SEO de un sitio, y su uso puede tener tanto beneficios como desventajas. Algunos de los efectos en el SEO incluyen:
Google y otros motores tratan a los subdominios como sitios separados del dominio principal, por lo que cada uno requiere optimización SEO específica. Esto significa que cada uno puede construir su propio perfil de palabras clave, relevancia y contenido, sin interferir directamente con el dominio principal. Esto es útil para aquellos que desean crear secciones dirigidas a audiencias o temas muy específicos, como un blog o una tienda que ofrezca contenido diferente al sitio principal.
Sin embargo, esta independencia tiene una desventaja: diluye la «autoridad de dominio». Cuando se opta por usar subdominios en lugar de subdirectorios, cada uno de ellos requiere esfuerzo y recursos de SEO independientes. Además, se puede diluir la visibilidad general si se emplean demasiados subdominios, ya que el dominio principal no recibe el mismo impulso que obtendría de un subdirectorio. Para maximizar esta independencia, es importante emplearlos solo cuando el contenido o los objetivos justifiquen su uso específico.
Una ventaja clara es que permiten diversificar y adaptar las estrategias SEO según el tipo de contenido. Esto resulta especialmente útil para sitios grandes o que abarcan temas muy variados. Por ejemplo, al crear un subdominio específico para una tienda en línea, como “tienda.mavance.es”, se puede adaptar el SEO a términos de productos y comercio electrónico, mientras que uno para el blog, como “blog.mavance.es”, se pueden optimizar artículos que atraigan tráfico informativo o educativo.
Este enfoque específico hace que la experiencia del usuario sea mucho más rica, ya que cada subdominio puede personalizarse completamente. En general, ofrecen una flexibilidad que los subdirectorios no permiten, especialmente si se desean implementar cambios visuales o de UX. Sin embargo, esta estrategia requiere una planificación cuidadosa para evitar que compitan entre sí o con el dominio principal en los resultados de búsqueda.
Uno de los aspectos clave del SEO es la construcción de autoridad mediante enlaces entrantes (backlinks). Con subdominios, cada uno debe construir su propia autoridad de enlaces, ya que los enlaces obtenidos en cada uno de ellos no benefician directamente al dominio principal. Por ejemplo, los enlaces que dirigen a “tienda.mavance.es” no aportan autoridad al dominio “mavance.es”, como ocurriría si la tienda fuera un subdirectorio (mavance.es/tienda).
Este aspecto requiere de un trabajo de SEO extra, ya que se deben crear estrategias de link building específicas para cada subdominio, optimizando cada uno como si fuera casi un sitio independiente. Esto puede ser beneficioso si cada uno apunta a un mercado o nicho distinto, pero se vuelve costoso y difícil de gestionar a largo plazo. Como resultado, el uso de estos para SEO se justifica solo si se requiere una identidad propia para cada sección.
Un aspecto crítico a considerar es que, en algunos casos, pueden llegar a competir entre sí o con el dominio principal en términos de palabras clave. Por ejemplo, si el dominio principal (mavance.es) y un subdominio (blog.mavance.es) publican contenido en torno a las mismas palabras clave, es posible que ambos aparezcan en los resultados de búsqueda para las mismas consultas, compitiendo entre sí.
Esta competencia interna puede reducir la efectividad del SEO en general, al dividir el tráfico potencial y dispersar la relevancia de los contenidos entre varias secciones. Para evitar este problema, es importante diferenciar claramente el propósito de cada uno y asegurarse de que no haya redundancia en las palabras clave que se están optimizando en el dominio principal y sus subdominios.
Nuestro consejo, aunque estés acostumbrado a escuchar esta respuesta, es que depende. Si tienes una web empresarial de un inmenso tamaño, puede venirte muy bien separar la información. A Google, por ejemplo, le conviene utilizar los subdominios porque sus servicios son muy diversos y cada uno de ellos es muy profundo e independiente: news.google.com/ para Noticias, books.google.com/ para Libros, o mail.google.com para Mensajería.
Si decides lanzarte a este «mundillo» de los subdominios, algo que sí te recomendamos tener muy en cuenta es que si lo haces vas a tener que trabajarlo como si fuera una web aparte en cuanto a esfuerzo y dedicación se refiere. Eso sí, también tienes la opción de dejarlo en manos de expertos, para lo cual puedes Contactar con Mavance y empezar a potenciar el SEO de tu subdominio ahora mismo.